Cuestión de amor

Que formación más intensiva,
experiencias y enseñanzas con caídas,
¿quién se forma en caricias
cuándo ni entiende la vida?
Todos solemos tropezar en eso del amor,
que sentimiento tan abstracto,
nos oculta o muestra el dolor.
Y en la espesura de la esperanza,
se calla la soledad,
sabe reemplazarla
con una persona ideal.
Simple, egoísta
el amor nos hace actuar,
que detalle más ínfimo
el de saber amar.
Me abraza el aire,
y me empuja el corazón,
¿qué sería de mí
si no sintiese amor?
¿Qué harían las almas
sin juntarse por alguna razón?
-razón desconocida cómo no-
Atracción elocuente
mezclada con obsesión,
así es la locura
que nos inunda el Amor.

Pasión nocturnal

Cae la noche entre los dos,
pido que no se termine,
quiero quedarme contigo
hasta que el sol germine.
Florecen flores al rededor,
la escacha que ya se derrite,
el tiempo hace rato se ha perdido,
la misma historia se repite.
Tiro suavemente de tu pelo,
mientras me busca la luna,
no quiero irme, todavía no,
el silencio me roba la cordura.
Aunque me suicide en cada esquina,
perdiéndome en tu boca,
-tú me mantienes despierta-
cuerpos entrelazados,
besos pendientes
embriagada por tu aroma.
Que absurdo parece,
desde el levante las estrellas se desvanecen,
¿dónde me encuentro?
Lo único que escucho es el viento.
-Sudorosa y en mi cama,
mi pelo enredado en la nada,
¿cómo he llegado hasta aquí?
Copas, delirios y demasiadas palabras.-

Sinceridad silenciada

Me rindo una vez más a pesar de quedar mal ante el amor, cupido me la ha vuelto a jugar como de costumbre. Que torpeza la de mi corazón que se emboba del viento y pierde la razón del compás y del tiempo cuando suena la melodía, de mentiras de tu boca, inexplicable ironía.
Hace años susurrando amor eterno y hoy por hoy me lamento por que no me digan ni te quiero. ¿Quizá sea difícil ser sincero? Hasta yo a veces no entiendo ni lo que siento en tus labios, gritos desesperados y las mariposas ebrias que me atacan. Que absurdo enamorarse para no sentir nada, para ello faltan hechos y sobran palabras.
Lloros, llantos y lágrimas, ahora dime, amado mío, ¿de qué sirve amar si no se crea un destino?

Carpe Diem

Cuando el silencio de la nada habla aún con la boca cerrada.
El pecado no entra pero el momento pasa.
Un instante de tiempo que se alarga o una botella de Ballantines rellena de agua.
Un motel de carretera que nadie visita, que tu corazón estalle al son de la dinamita.
Escala montañas de sueños inalcanzables, todo aquel que no te apoye no es amigo ni es nadie.
Vive y vuela con el viento de primavera que es la estación que la sangre altera.
Canta la canción que te gusta a gritos, que se entere el vecino del quinto.
Capta momentos con la retina no con simples fotografías, la moda se irá pero los recuerdos forman tu vida.
Haz lo que te de la gana mientras seas feliz, todo lo que tienes que hacer es creer en ti.

Ahora vete

Una copa más de lo que sea,
quiero perderme en la nada,
quiero que el frío de la noche
calle nuestras palabras.
Mil brindis de ginebra
quiero que se nuble el sol,
quiero que tus besos
se desvanezcan con el ron.
Mentiras absorbidas,
quiero perder el conocimiento,
quiero no recordar tu perfume
que tanto daño me ha hecho.
Días y días sin ti,
quiero que te vayas en silencio,
quiero que mis poesías
sirvan para llevarte lejos.
El tiempo se burla de mí,
quiero vivir cada segundo,
quiero volverme loca
y se me haga pequeño el mundo.
Respirar aire sin el tuyo,
quiero sonreír sin motivo,
quiero que mis manos
bailen al son compasivo.
Vete ya de mi vida,
quiero ser libre de nuevo,
quiero amar a otra alma
que no sea solo un sueño.

Agradable compañía

En la inmensidad de la noche

el anhelo me invade,

admiro a la Luna que al cielo acecha,

yo ya no poseo ese coraje.

Entre lino contemplo la oscuridad,

sola sin ningún temor

más que el de quedarme sola

sin verdadero horror.

Clamo a la vida gritando

que me deje volver a amar,

que incite a mi corazón desgastado

a latir una vez más.

Se burla de mi la noche,

tan fría y acompañada de estrellas

que brotan de mis labios

cada vez que me besas.

¿Quién quisiera soltarte?

Si la vida se me hace eterna

si tú no estás a mi lado,

tan corta cuando besas mis labios.

Susurrando reclamo tus abrazos,

¿qué más me queda?

si yo no sé dónde esperar

y tú no sabes lo que esperas.

Espero el llegar de mi amanecer,

noche bella se va,

con los sonidos de tu boca

me pudieras acunar.

Sentimientos alborotados,

cabezas aturulladas por la vida,

corazones desgastados

y yo solo necesito tu compañía.

Rogando fuego

La brisa que susurra tu nombre,
yo que esquivo el silencio de tu boca
mientras el viento que azota tu pelo
me da una razón más para volverme loca.
Inhalo el poco aire que me llega a los pulmones,
Exhalo el humo del cigarrillo que me queda,
y entre tus labios juro al cielo
Mi oración más sincera.
Que me queme el demonio si miento,
que arda en plegarias de amargura,
que mis ojos lloren tu sangre
y mis piernas tiemblen de locura.
El alcohol prende mis arterias,
la noche y las luces me alumbran,
miles de luciérnagas se dejan ver
en esta incertidumbre que perdura.
Me tienta tu boca que me acoge,
me marea la cordura que se larga,
yo me consumo como las cenizas
mientras pido clemencia en la calma.
Grito desesperada a las mismas estrellas,
miro tus ojos y mi reflejo desaparece,
¿dónde queda el agua en el infierno?
¿Dónde navego sin mar inerte?
Inspirada al verte sin pronunciar palabra,
clavando la mirada en tu cintura,
mientras voy jurando al diablo
que no haré ninguna diablura.
Claro que si no es contigo,
no quiero quedarme en este mundo,
que me absorve la realidad
y se queda lo absurdo.

Doy gracias

Hoy vengo a dar las gracias
a todo aquél que aunque incsonciente me oye,
que supo siempre abrazarme fuerte
a pesar de que a veces lo odie.
Vengo a dar las gracias
a la brisa que acaricia silenciosa mi cara,
a las gotas que que brotaron
del cielo siendo mis propias lágrimas.
Traigo miles de agradecimientos
a mi familia que sin "te quieros" me forjaron,
tal frialdad corre por mis venas,
la propia primavera me arrebataron.
Necesito dar las gracias
a los secretos que guardé sin ser míos,
y los míos convertidos en demonios
que habitan en mi mente, gran abismo.
Miles de garcias
a la música siendo mi apoyo más sincero,
a mi sangre y el alcohol cuando solo
el sueño consigue matarme por dentro.
Un último agradecimiento
a las carcajadas infinitas más sinceras,
los buenos amigos y las locuras varias
porque sin ellas estaría muerta.
Y aquí acaban las gracias,
que fueron pocas desde gracia Divina,
Dios me dejó tirada con tanto desprecio
que creí que ya no estaba viva.

A pesar de todo sonrío,
vivo bien aún hundida en la mierda,
y doy gracias por haber crecido así,
soy infinitamente feliz. 

Gracias.

Ordenado letras

Tantos años refugiada en los poemas,
siempre escondiendo personajes
que puede que no fuesen secundarios
simples reflejos de mí sin agravios.
Algunos que criticaron mis palabras,
esos situados tras mi espalda,
otros fueron seguidores de mi locura
aunque siguan siendo palabras.
Mil hostias contra el suelo,
sátiras interminables de mí,
con golpes y sin corazón apenas,
risas en las que yo no reí.
Tristeza que me ahogaba la sonrisa,
los pulmones no me funcionaban,
creyendo que eran simples bromas
-la maldita vida me maltrataba-.
Lágrimas que perdí la cuenta
mojaban no hace mucho mi papel,
¿quién soy yo para hacer sentir
un poco de poesía sobre tu piel?
El reloj sigue siendo mi enemigo,
la soledad se deja llevar por el tiempo,
¿quién soy yo para negarlo?
Le doy mi propio consentimiento.
Se dejó escuchar el silencio,
Mentiras de bocas conocidas,
que bien sienta una mentira piadosa,
que duro es saber la verdad amiga.
Pero así es la vida,
complicada y con belleza incierta,
dejé atrás el pasado sin cambiar nada,
ahora solo me queda la impaciencia.
Sé perfectamente ordenar letras,
sé como crear música sin melodía,
puede que no llegue a poeta,
pero siempre haré poesía.

Desastres naturales

Pequeñas sacudidas de tu piel,
los labios humedecidos de deseo,
¿podré callar la pasión contra ellos?
Creo que vivo muriendo.
Acariciar tu cabello cobrizo,
danzar entre las gotas de agua,
niebla que caminaba por mi montaña
maremotos que arremetían tu mar en calma.
Solo dos almas que se atormentan,
que viven en soledad sin sol,
las nuves hacen diluviar tu cuerpo
y no tus labios bañados en alcohol.
Es inútil que me quieras perder,
si todo lo que quiero, vivir sin censura,
temporales mañaneros
y miles de tonrnados de locura.
Lentos vendavales en tus brazos,
arremetidas de olaje en tu ser,
piernas entrelazas en huracanes
que nos hagan tocar el amanecer.
Te encuentras en plena erupción,
lo veo en los oleajes tempestuosos
que destrozan mis profundos bosques,
¿quién más visita el océano de tus ojos?
Arde la frondosidad en mi retina,
me quema la amargura y la duda,
¿qué más da que arda en soledad?
si tú inhundas mi cabeza con culpa.
Ahí llega el terremoto,
sacude mi cuerpo pegándolo al tuyo,
plena época de sequía en tu boca,
los detrozos de gemidos absurdos.

-Y después de la tomenta
viene la requerida calma
querída Clara de mi cielo,
sois todas unas falsas.-

Esperando nada

Y sigue rodando el tiempo,
es efímero lo que uno cuenta
si las hojas no se las lleva el viento,
"una décima de segundo" espera.
Perder el norte viéndote a ti,
agudiza los sentidos, entre mis manos tú,
"seda y hierro" pueden llegar a ser
tu corazón tan frío y lo cálido de tu piel.
Sincero me sonrojo y me distraigo,
espío al silencio sin saber por qué
me asomo a la ventana
¿Dónde se ha ido "la chica de ayer"?
Perdido y confuso me puse a caminar,
los días pasan y fluyen hacia atrás,
primavera e invierno, mezcla de "estaciones"
"pasa el otoño" y el tren contigo sigue sin llegar.
No hizo efecto nuestro "elixir de juventud"
bebimos nuestras propias mentiras,
tú sigues siendo joven y bella,
yo envejecí creyendo que me querías.
¿Fueron sueños nuestras bellas palabras?,
"lucha de gigantes" terminadas en colchón,
fantasmas del pasado, mounstros de papel
con engaños absurdos perdí la razón.
Aún así sigo germinando en tu pecho,
"el sitio de mi recreo" es similar,
donde la cordura y tu cintura
entre mis manos "se dejaba llevar".
A pesar del viento en mi contra,
de Dios y de nuestro castigo,
yo que salí "de algún lugar perdido"
aún así "me quedo contigo".

Tributo al gran compositor y artista allá dónde esté Antonio Vega.

Un minuto

Estoy un poco perdida en la inmensidad de la vida. Que corta se puede hacer una respiración profunda para necesitar más, o que una lágrima desencadene las cataratas de tristeza o felicidad. Un beso puede durar milésimas y con su roce crea un viaje interestelar por el universo que se esconde en alguna parte. Un minuto puede ser un mundo esperando algo que ansías y aún así siguen siendo esos sesenta segundos de incertidumbre. Un café puede ser reconfortante o aburrido dependiendo de con quién te encuentres. Un tren que para sobre las tres de la madrugada en algún lugar perdido, nadie sabe que dos almas buscan mutuamente desesperadas su abrigo.
Yo solo sé que gracias al tren de las tres, me invitaste a un café que no tomamos juntos. Un minuto para besarnos sin que se enterase el mundo y volver al tren... Y ahora podría estar contigo, pero el minuto seguirían siendo sesenta segundos y nuestro reloj perdió sus números.